El Black Friday no tiene tanto «sex appeal» como tenía hace algunos años a ojos del consumidor. Y la culpa sería de la fragorosa entrada en escena de Temu y Shein.
El Black Friday es probablemente la jornada de consumismo más desaforado sobre la faz de la Tierra (para desconsuelo del baqueteado planeta Tierra). Sin embargo, parece que esta importante cita con las compras, cuyas ofertas se concentraban otrora en única jornada y ahora se prolongan durante prácticamente todo el mes de noviembre, no tiene tanto «sex appeal» como tenía hace algunos años a ojos del consumidor. Y la culpa sería de la fragorosa entrada en escena de Temu y Shein.
De acuerdo con un reciente estudio emprendido por Idealo en Alemania, más del 40% de los consumidores consultados por el portal de comparación de precios sostiene que ya no necesita beneficiarse de los agresivos descuentos solapados al Black Friday porque plataformas asiáticas como Temu y Shein ponen a su disposición gangas imbatibles durante todo el año. En la investigación, que se llevó a cabo en septiembre en colaboración con el instituto de investigación de mercados Kantar, se realizaron entrevistas a 2.000 consumidores.
Y los resultados (a bote pronto sorprendentes) del estudio de Idealo y Kantar no son en modo alguno aislados, pues otra investigación emprendida también en tierras germanas por el instituto de investigación de mercados IFH KÖLN llega a una conclusión similar. Casi el 20% de los consumidores potencialmente interesados en el «Black Friday» declara que hará uso en menor medida este año de los jugosos descuentos que traerá consigo esta jornada y lo hará porque ya se beneficia durante todo el año de los chollos de Temu, Shein y compañía.
«Si otras plataformas ofrecen de manera permanente precios bajos durante todo el año, la importancia de jornadas especialmente enfocadas a los descuentos como el Black Friday decrece inevitablemente para los consumidores», subraya Kai Hudetz, managing director y experto en retail de IFH KÖLN. A juicio de Hudetz la presión sobre los precios está pegando el estirón de manera absolutamente insoportable y a los retailers locales les está costando seguir el ritmo a sus rivales venidos de Asia. Los desafíos directamente emparentados con los precios acosan particularmente a los retailers consagrados a sector como la moda, los accesorios y la decoración.
Durante el Black Friday, que se celebra este año el 29 de noviembre, muchos retailers agasajarán a sus clientes con productos a precios reducidos, aunque algunas marcas se han adelantado ya a esta efeméride y llevan embarcadas en un auténtico festival de descuentos desde principios de este mes.
En España el Black Friday no parece dar síntomas de agotamiento
En Alemania el 46% de los consumidores tratará de «cazar» gangas este año durante el Black Friday, una cifra que, aunque abultada, es tres puntos porcentuales menor que en 2024. Donde esta jornada de descuentos no parece perder fuelle (pese a la brutal competencia ejercida por Temu y Shein) es en España, donde los consumidores prevén gastar este año una media de 295 euros durante el Black Friday, un 18% más que en 2023, de acuerdo con un informe de Rocket Digital.
El Black Friday podría engullir este año en nuestro país el 40% de la facturación anual de los comercios españoles, y esta proporción se disparará incluso hasta el 60% en el caso de las empresas que venden única y exclusivamente a través de la red de redes.
Aun cuando en otros países europeos la moda se convierte en la estrella más rutilante durante el Black Friday, en España esta jornada se utiliza sobre todo y ante todo para comprar consolas, móviles y dispositivos de última generación. Los productos tecnológicos constituyen más del 30% de las compras acometidas por los españoles durante el Black Friday.
Pese a que España y otros países del viejo continente llevan participando desde hace años en el torbellino consumista emanado del Black Friday, lo cierto es que este fenómeno hunde sus raíces en Estados Unidos, de donde fue importado con mucho éxito hace ya más de una década.
El Black Friday se celebra allende los mares tras la jornada festiva de Acción de Gracias, que tiene lugar el último jueves de noviembre, y marca el inicio de la temporada de compras navideñas en Estados Unidos.