Los favoritos de 2024 de la redacción de uVeJuegos

Alberto Hernanz

Beto

-Favorito del año: Warhammer 40 000: Space Marine 2
-Decepción del año: Final Fantasy VII Rebirth
-Sobrevalorado del año: UFO 50
-Infravalorado del año: Prince of Persia: The Lost Crown
-Juego que merece una mención: Marvel Rivals
-Deseo de 2025: Fable

2024 no ha sido un año en el que he completado todos esos grandes lanzamientos de los que habla todo el mundo, algunos siquiera los he probado unos minutos y los he añadido a mi backlog para el próximo año. Pero si hay un título lanzado en este curso que ha logrado cautivarme por horas, ese ha sido Warhammer 40 000: Space Marine 2. Todo sea dicho que no tengo ni idea del universo de Warhammer, pese a tener amigos que desde hace siglos me han enseñado sus ejércitos de figuritas de soldados azules. El videojuego de Saber Interactive es adrenalina pura y dura. Acabar con cientos de bichos que vienen a por ti, sin otra pretensión más allá de acabar con ellos es todo un vicio. Disfrutar de la campaña y las operaciones en cooperativo con amigos es un pozo de horas en el que no dejas de disfrutar. En muchas ocasiones es difícil encontrar un videojuego con el que desconectar del día a día o esos momentos complicados que uno puede estar viviendo, y el universo Warhammer con Space Marine 2 me ha brindado esa oportunidad de disfrutar de los videojuegos dejando a un lado esas preocupaciones que he tenido este último año.

Me duele mucho mencionar Final Fantasy VII Rebirth como mi mayor decepción del año, cuando era el videojuego que más esperaba en 2024. Puedo que parte de la culpa de sentir esa decepción la tiene en parte Final Fantasy VII Remake. La primera parte de esta trilogía reinventada que tiene en marcha Square Enix la gocé muchísimo. Es más, Remake logró que por fin disfrutase de la narración de Cloud y compañía, ya que el juego original de la primera PlayStation es quizás el Final Fantasy tradicional que menos me ha atraído siempre. Es por eso que con Rebirth esperaba poder engancharme durante decenas de horas y acabar el juego en un corto periodo de tiempo, pero todo lo contrario: su mundo abierto me ha parecido un pozo de minijuegos y actividades que me han atraído cero. Llegar a momentos o ubicaciones importantes de la historia, y que me obligasen a jugar a las cartas, u otras actividades que me sacan de la historia, me ponía de los nervios. La sensación de estar completando más minijuego, que disfrutar con el fabuloso sistema de combate que el juego ofrece iba mermando mis ganas de seguir jugando. Tanto fue así que acabé abandonando el título con unas 35 horas. Veremos si antes de la tercera parte le doy una nueva oportunidad.

A diferencia de Final Fantasy VII Rebirth, al cual he colocado como decepción, UFO 50 me parece el título sobrevalorado del año por varias razones. Existe un enorme catálogo de videojuegos, géneros y experiencias con las que disfrutar en el mundo de los videojuegos, y hay que entender que no todos los títulos están destinados a todos los jugadores. UFO 50 es uno de esos títulos que no casan conmigo, pero a diferencia de otros videojuegos que no me atraen, y en los que sí llego a ver bondades, aquí no acabo de entender la repercusión de este videojuego en 2024. Al final son 50 «minijuegos» que forman parte de una historia que los engloba. En lo personal me gusta dar nuevas oportunidades a algunos títulos o géneros, y es posible que UFO 50 vuelva a ser uno de ellos en unos años, cuando, imagino, ya nadie se acuerde de él.

Todos los años hay títulos de los que todo el mundo dice maravillas, pero luego acaba teniendo un número de ventas normalito, y cuando llegan los momentos de rememorar los títulos más importantes del año son muchos los que se olvidan de ellos. Esta anterior definición viene como anillo al dedo para Prince of Persia: The Lost Crown, un fantástico metroidvania y un videojuego que todo el mundo quería jugar en la primera mitad del año. Yo lo disfruté en Nintendo Switch y sin lugar a dudas me ha ofrecido una de las mejores experiencias del género, y precisamente no han sido pocos los metroidvanias que he podido probar en los últimos años. En caso de no haberlo jugado, os recomiendo hacerlo, más teniendo en cuenta las interesantes rebajas de precio que está teniendo en todas las plataformas.

Fortnite y Overwatch 2 son esos dos títulos que vengan arrastrando de años atrás en los que juego cada una de sus temporadas, o mejor dicho, jugaba, ya que empecé 2024 fuerte con ellos, pero lso he dejado por el momento. Ambos títulos me han ofrecido grandísimos momentos con amigos en la primera mitad del año, pero según pasaban los meses y las temporadas, la experiencia de juego me iba cansando más. El anuncio de Marvel Rivals no llamó mi atención, y su beta tampoco, pero con el lanzamiento de la versión completa del free to play multijugador he descubierto un videojuego que me ha cautivado hasta el punto de echar unas partidillas todos los días. Es cierto que requiere ciertos balances o ver cómo evoluciona el contenido de sus próximas temporadas, pero la base del hero shooter de Marvel me parece muy sólida para disfrutar sin pretensiones. Y como era de esperar, he caído con la compra de su primer pase de temporada.

Con lo que ha sido Microsoft y Xbox para mi… Llevo ya unos años esperando un nuevo Gears of War, y por fin en 2024 ha sido anunciado, pero aún sin fecha. Veremos si para este 2025 o 2026. Es por eso que el nuevo Fable es el videojuego que más espero para 2025, ya que este sí está confirmado para los próximos 12 meses. Después de los experimentos de la serie con Kinect, o betas de ese Fable del que ya ni recuerdo el nombre y acabó siendo cancelado, no hago más que añorar la grandísima trilogía original que nació en Xbox y culminó en Xbox 360. Solo espero que llegue a buen puerto, que sea ese juego que tanto queremos los que crecimos con Xbox y una de sus franquicias más importantes. Solo espero que no se retrase más, que para esperar videojuegos que nunca llegan ya tengo a Silksong.

Sergi Bosch

elite

–Favorito del año: Astrobot / Hades 2
–Decepción del año: Visions of Mana
–Sobrevalorado del año: Dragon Age The Veilguard
–Infravalorado del año: Unicorn Overlord
–Juego que merece una mención: Mouthwashing
–Deseado de 2025: Ghost of Yotei

Sí, he hecho trampa. Tampoco es ninguna sorpresa, porque soy mala persona y siempre hago este tipo de cosas en estos artículos; quiero decir, la vida ya es demasiado complicada como para rayarse eligiendo entre dos juegos. ¿Es Hades II elegible como favorito del año, teniendo en cuenta que técnicamente no ha salido del early-access? Ah, pero es que técnicamente también resulta que ha salido, porque el juego está prácticamente entero y es genial de principio a fin. Así que, a fin de evitar calumnias varias y síndromes de estrés post-traumáticos recurrentes, he puesto a Astrobot primero; en esencia, la decisión era fácil, estamos hablando de uno de los mejores plataformas en tres dimensiones de la historia, y uno de los mejores en general fácilmente de los últimos diez años. De Hades 2 mejor hablamos en otro momento, pero, al igual que el primero, es otra obra maestra.

En cuanto a la decepción del año, tengo que destacar a Visions of Mana, aunque con matices. Matices porque, a grandes rasgos, tampoco es que esperara demasiado de él y, sin embargo, aún así encontró la manera de resultarme decepcionante. Con un bucle jugable que recuerda demasiado a los grandes mundos abiertos free to play con mecánicas gacha, aunque sin esa incitación al consumismo, y con un ritmo y una historia rayanas en la demencia más pueril, Visions of Mana me puso a prueba unas cuantas veces cuando estaba analizándolo. Es muy bonito y mejora con las horas, así que si te encantan los JRPG es posible que todavía termines disfrutándolo.

El sobrevalorado del año es, en mi opinión, Dragon Age: The Veilguard. El título tiene sus cositas, eso está claro, pero también es evidente que lo que ha sacado Electronic Arts ni es rol, ni es Dragon Age, ni es tan siquiera un zombie de lo que fue la franquicia de BioWare. Al margen de las chorradas de las polémicas (sí, tiene cosas anticlimáticas, ya lo sabemos), y de la liada bestial que acompañó a los análisis en su lanzamiento, The Veilguard es, simplemente, un juego de acción que está “bien” y que tiene un buen apartado audiovisual. El lore de fondo es potente, porque bebe de Origins, Inquisition y la segunda entrega, pero ya está.

Por otro lado, el infravalorado del año es Unicorn Overlord, no solo porque creo que no se le ha hecho justicia a nivel de crítica, sino porque tampoco es que haya tenido ningún tipo de representación tangible o relevante en los Game Awards. Otro RPG genial con el sello de Atlus, en este caso desarrollado por Vanillaware (13 Sentinels, otra obra maestra), y ya van…

El juego que merece una mención, en mi opinión, es Mouthwashing, un indie de terror cortito y que trata temas bastante profundos aprovechándose de su ambientación de ciencia ficción oscura y desesperada. Recuerda un poquito a I Have No Mouth and I Must Scream, en ese sentido, aunque es bastante más accesible a nivel jugable (es un survival horror en primera persona, después de todo). I Am Your Beast y 1000xResist, por cierto, también son grandes opciones a tener en cuenta; el primero tiene un rollito a Neon White, uno de mis indies favoritos de siempre, y el segundo es una fumada de ciencia ficción bastante conseguida… Pero Mouthwashing es Mouthwashing, y con eso no se juega.

Finalizamos con el videojuego más esperado de 2025. Para mí, en un año en el que ahí anda GTA VI, cerniéndose como una tormenta sobre toda la industria, el más esperado es Ghost of Yotei. Es increíble lo que consiguieron Sucker Punch y PlayStation con Ghost of Tsushima, el “antecesor espiritual” de este Yotei, en cuanto a jugabilidad, diseño artístico, y perfeccionamiento de la fórmula “Assassin’s Creed” del mundo abierto con características de RPG de acción. Seamos serios: les pasaron por encima a los chicos de Ubisoft. De Ghost of Yotei espero muchísimas cosas, pero sobre todo espero que tenga alma, como el primero, y que sea igual de divertido.

Jordi Marcobal

GamingXTorpes

-Favorito del año: Neva
-Decepción del año: Silent Hill: The Short Message
-Sobrevalorado del año: Metaphor: ReFantazio
-Infravalorado del año: Senua’s Saga: Hellblade 2
-Juego que merece una mención: Neon Blood
-Deseado de 2025: The First Berserker: Khazan

Va a terminar un nuevo año y ya va tocando mirar al retrovisor y comprobar como de bueno ha sido el viaje.

Determinar cuál ha sido mi «Top1» de este 2024 ha sido bien sencillo, porque no hay ningún otro videojuego que haya calado tan profundo en mi alma y mi corazón de videojugador veterano como este. Neva, de los barceloneses Nomada Studio, ha logrado emocionarme como hacía tiempo que no lo lograba hacer un videojuego. Por su inmersividad, su apuesta y su diseño artístico, Neva es, sin ningún tipo de duda, mi favorito de 2024.

Que sí. Que seguro que muchos de vosotros pensaréis que no se le puede pedir tanto a un videojuego gratuito. Pero realmente, y pese a que estamos delante de un gran producto, Silent Hill: Short Message es de todo menos un Silent Hill, y aún más después de ver la pinta que ha tenido el remake de la segunda parte. Una buena propuesta, pero alejada de lo que algunos consideramos un buen «Survival Horror». Si a eso se le suma, las enormes ganas que los fans teníamos de poner nuestras zarpas en un nuevo producto de la franquicia, la decepción era inevitable. Un lastre que, lamentablemente, puede pesarle a la que es, sin lugar a dudas, una curiosa y original propuesta.

Nunca, jamás, en toda mi vida, he podido con la saga Persona. Y os juro que lo he intentado. Lo intenté con Persona 5 Royal en su día, y nunca llegué a conectar con él. Después de soltar estas frases por las que más de uno podría llegar a lapidarme, dejad que os diga que siempre he sido consciente de la enorme calidad de los títulos de Atlus, una cosa no quita la otra. Cuando oí hablar de Metaphor: ReFantazio, mi curiosidad aun latente por sus videojuegos volvió a aparecer (por aquello de que el hombre es el único animal que tropieza dos veces con la misma piedra). Así que cuando salió la demo fui raudo y veloz a instalarla, y me encontré más de lo mismo. Seguramente sea fruto de mi desconocimiento total y absoluto por lo que para algunos es una excelente manera de afrontar un JRPG, pero ¿de verdad tanto bombo? En fin, como buen espécimen humano que soy y me considero, seguramente vuelva a tropezar por tercera vez con la misma piedra y haga para encontrar un hueco suficientemente amplio como para darle una segunda oportunidad. Si a tanta gente le gusta, algo tiene que tener. Será cuestión de encontrarlo.

Al igual que a la hora de escoger cual ha sido mi favorito del año, tampoco he tenido dudas en cual es el videojuego más infravalorado, y ese no es otro que Senua’s Saga: Hellblade 2. Es una verdadera lástima que una apuesta narrativa tan brillante como la de este título, no haya triunfado como se merece. Un título que tocó claramente el techo gráfico de la generación, y que fue defenestrado por el simple hecho de acercarse a una manera de comunicarse con el jugador bastante más cinematográfica que su antecesor. Un gran videojuego con el cual tengo la dolorosa sensación que fue olvidado muy pronto, tanto por los jugadores como por la propia Microsoft. Una pena.

Que en España se hacen buenos videojuegos ya es algo que no extraña a nadie. Mismamente Neva, anteriormente citado como el culmen videojueguil de mi particular 2024, ha tenido una proyección internacional brutal. Asistir al certamen por excelencia del videojuego independiente patrio, el IndieDevDay, en septiembre, terminó de confirmarme lo mucho y bien que se desarrollan videojuegos en nuestro país. Y un gran ejemplo de ello, son los chicos de ChaoticBrain y su Neon Blood, una aventura gráfica «old school» cyberpunk futurista «pixelart» en 2.5D , que no debería dejar indiferente a nadie. No os privéis de darle un tiento, no os arrepentiréis.

Para terminar una solemne petición:

“Queridos Reyes Magos de Oriente, que sé que sois jugones como yo. Creo que este 2024 me he portado bastante bien. Me gustaría que este 2025 me trajerais, a poder ser lo antes posible, el The First Berserker: Khazan, de los coreanos de Neople. Ya sabéis como me gustan los títulos de genero soulslike, y como ya seguramente hayáis podido ver en el último tráiler emitido en los The Game Awards de ese señor tan simpático, el videojuego tiene una pinta estupenda. Si no puede ser, me conformaré con que este 2025, sea igual de divertido en lo jugable que el pasado 2024.

Siempre vuestro, Gaming X Torpes”

David Vigón

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–-Favorito del año: Persona 3 Reloaded
–Decepción del año: A League of Legends Tale: Song of Nunu
–Sobrevalorado del año: Marvel Rivals
–Infravalorado: Let’s Sing 2025
–Un título a tener en cuenta: Bittersweet: A Pinneaple Revenge
-Deseado de 2025: The Dark Pictures: Directive 8020

La existencia es cíclica, el tiempo es circular, el eterno retorno. En 20214 viví una época convulsa y sin tiempo para analizar (y de jugar ya ni hablemos), sólo cuatro títulos en ese año, uno de ellos Persona 4 Arena Ultimax. Diez años después volví a jugar poco y analizar aún menos, y también uno de los afortunados fue otra entrega de la saga de Atlus: Persona 3 Reloaded. En diez años la franquicia pasó de ser una exclusividad de nicho con un inexplicable spin-off multiplataforma a ser una obra famosa y querida por todo el mundo, traducida al español y disponible en todos los sistemas. Gracias a ese juego de lucha me adentré con timidez en ese universo de Personas y Sombras y ahora analizo una de sus entregas remakeadas, además de los títulos más potentes de 2024. ¿Qué cabe decir de este Persona 3? Disfruté como un muchacho, aunque reconozco que su ritmo inicial no terminaba de convencerme. Por suerte no tardé en abrazar con gusto esa historia de conspiraciones, torres infinitas que aparecen a medianoche y zagales que siguen su rutina estudiantil cada día mientras por la noche se pegan con monstruos simbólicos y mitológicos. Lean mi análisis, ¡es como estudiar de nuevo para la selectividad!

Soy consciente que Song of Nunu prometía ser una aventura narrativa tranquila, accesible y familiar, sin muchos aspavientos ni complicaciones. Era consciente de que los protagonistas eran el zagal Nunu y el peludo Willump, los campeones más entrañables de League of Legends, incluso de que la intención de la extinta Riot Forge era ofrecer juegos de todos los géneros y públicos posibles. Todo eso lo tenía en mente, de verdad, pero no me esperaba un resultando tan aburrido. Existen pocos juegos que me aburran tanto, incluso me adormezcan, como Shrek: Treasure Hunt, pero aquí está Song of Nunu. Su apartado gráfico y su diseño artístico son una delicia, el principal gancho del juego y el truco con el que engañó a los medios españoles. Eso y el hecho de que es obra de Tequila Works, una de las compañías españolas favoritas de toda España. ¿Quién criticaría a Tequila? A día de hoy es el último trabajo del estudio desde que se anunció su quiebra económica, causada por la deslealtad de Tencent. Es deseable que la compañía madrileña se recupere, o al menos que no se despida de la industria con este soso Song of Nunu.

Marvel Rivals es divertido y adictivo, nadie niega eso, no obstante… ¿el mundo necesita más hero shooters?, ¿necesitamos más multijugadores? A ver, manejar a un héroe de Marvel desde una perspectiva en tercera persona, y gratis, es muy tentador, pero no ignoremos al elefante en la habitación. No ignoremos a Mammomax. Detrás de un lucrativo juego en línea se esconde Tencent y su monopolio, así como unos diseños muy feos de los personajes. En fin, Marvel Rivals estará entre nosotros muchos años, mejor que nos acostumbremos. Si añaden a Mammomax a la plantilla, les perdonaré todos sus pecados y abrazaré su modelo free-to-play. ¡Y que lo metan en Marvel Snap!

Si existe un genero infravalorado a día de hoy, ese es el género musical, tanto en los videojuegos como en el cine. Tiene éxito comercial y una comunidad fiel de fans cantarines y bailarines, pero el resto de personas les observan a lo lejos con el cejo enarcado y gesto desdeñoso. La soberbia de quienes creen que ellos están por encima del Bien y del Mal, del Mi y de la La, de La la land y de la ciudad de las estrellas. Tampoco quiero presumir de ser un mitómano ni un melómano, pues mi ritmo corporal y oído musical es similar al de un puñetero topillo ciego. ¡Puñetas, quiero bailar! No obstante a lo tonto ya he analizado tres juegos musicales (entre ellos Lips, ¿te acuerdas, Microsoft?) con este Let’s Sing 2025 y todo apunta que analizaré el resto de entregas anuales. La veterana franquicia de Voxler domina el arte de la gamificación y de su acercamiento a todo tipo de usuarios, incluso crea divertidas historias con graciosos personajes (de esos que no tienen cuerpo). Su selección de temas de este 2024 no es muy extensa ni gusta a todo el mundo pero incluye a Cascada, y si hay eurodance de por medio, todos somos felices.

Bittersweet: A Pinneaple Revenge es un pequeño título español con un estrambótico diseño artístico y un potente mensaje. No es muy largo, ni muy desafiante, casi se podría decir que es un tebeo interactivo como A Raven Monologue, pero igualmente es muy disfrutable. Tiene ese regusto de dibujo animado de los años 90 o 2000 que nunca pasa de moda,el cual encaja muy bien en esta historia juvenil de trastadas inocentes y venganzas con piñas. ¡La Bruja recibirá su castigo por ser mala gente! Seas usuario de PC o seas de móviles, debes probar la obra de Patrones & Escondites. Te sacará una sonrisa al mismo tiempo que te recuerda que el acoso escolar es un tema serio, pues mucha gente se preocupa más por los sentimientos de un futbolista que de un adolescente.

Supermassive Games no está pasando por un buen momento. Ha sufrido despidos y sus últimos títulos fueron recibidos con frialdad, incluso su crossover con Dead by Daylight. ¡No me importa! ¡No me importa la opinión de sus detractores ni quienes critican su peculiar fórmula de película interactiva donde todos los personajes pueden morir si eres un patán jugando. O si eres un sociópata. No me importa, yo quiero jugar a Directive 8020, la quinta entrega de su antología The Dark Pictures Anthology. ¿O sería primera entrega de la segunda antología? La temática y ambientación espacial-futurista aún no había sido retratada en la inexorable biblioteca del Curador. Será el momento de recrear algunos clásicos del terror espacial como Alien, Fuerza vital, Horizonte final, La galaxia del terror, Critters 4 o Leprechaun en el espacio.

Carlos Vázquez

Haztecamarera

–Favorito del año: Emio – El Sonriente: Famicom Detective Club
–Decepción del año: Tetris Forever
–Sobrevalorado del año: Bandle Tale
–Infravalorado del año: Open Roads
–Juego que merece una mención: Mika and The Witch’s Mountain
–Esperado del año que viene: Leyendas Pokémon: Z-A

Si echo la vista atrás, creo que este 2024 ha sido uno de los años en los que más videojuegos he jugado, pero sin duda ha sido el año en el que menos juegos nuevos de lanzamiento he probado. Ya en enero me propuse terminar todos aquellos títulos acumulados de años anteriores, porque no quería que la pila de pendientes continuara creciendo sin control. Además, la vergüenza de comprar un nuevo videojuego cuando tengo tantos esperándome en casa a ser disfrutados siempre está ahí, acechando. Así que en ese aspecto, me doy por satisfecho. Aunque si ha habido un juego de 2024 que me haya gustado por encima del resto, ese ha sido Emio – El Sonriente: Famicom Detective Club. Objetivamente, entiendo que es difícil pensar en este título como en el mejor lanzamiento de 2024, pero es que a día de hoy, meses después de terminarlo, aún recuerdo escenarios y personajes de la historia que me ponen los pelos de punta. Todo un logro hoy en día, que pasamos de un título a otro muchas veces sin procesar su contenido o su mensaje.

En cuanto a mi decepción, he de admitir que Tetris Forever no ha estado a la altura de mis expectativas. Soy un apasionado de los juegos de Tetris, y es raro el lanzamiento oficial que se me haya escapado generación tras generación. En este caso, con este título incluído dentro de las Gold Master Series de Digital Eclipse, parecía que iba a proporcionarnos toda una experiencia multimedia didáctica por el paso del tiempo de franquicia. Lamentablemente, el juego se queda a medio gas, faltando por incluir grandes títulos de la saga. Además, el nuevo modo de juego Tetris Time Warp no es tan divertido de jugar como podría parecer. Pero aún hay esperanza, pues hace pocos días añadieron una actualización que incluía el juego Welltris y algunos cambios interesantes. Está por ver si seguirán por este camino y podremos ver algún día los Tetris de GameBoy y GameBoy Color sin tener que depender del Nintendo Switch Online.

Como juego sobrevalorado, tengo que mencionar Bandle Tale: A League of Legends Story. Cierto es que en un primer momento no parece que este haya sido un juego especialmente valorado por la comunidad en general, pero creo que dentro de los cozy gamers sí que había cierta expectativa en el resultado de este título. Lástima que detrás de esa estética pixel preciosa, porque la tiene, se encuentre una jugabilidad lenta y poco adictiva. Apenas recuerdo nada de la historia de este título, y eso es más que suficiente para incluirlo dentro de esta categoría

Pero si hay un juego que considero que ha sido el infravalorado del año, ese ha sido Open Roads. Esta aventura narrativa en la que acompañábamos a una madre y a su hija adolescente por un viaje en el que pasado y futuro se entrelazaban, sigue teniendo un lugar privilegiado en mi corazón. Durante toda la travesía podía sentir el desasosiego de sus protagonistas y esa sensación de estar a punto de cerrar un ciclo, como en el caso de la chica adolescente, que irremediablemente empezaba ya a ser una persona adulta. Un juego corto pero capaz de crear una atmósfera que permanece en el recuerdo del jugador pese al paso del tiempo.

En este revisionado de mis títulos de 2024 no podía faltar Mika and The Witch’s Mountain. Esta aventura en la que encarnábamos a una aprendiz de bruja que se dedicaba a realizar repartos con su escoba ha sido mi espacio seguro este año. El estudio valenciano Chibig Studio supo crear un juego bonito con el que, sin grandes pretensiones, conseguía entretener con mecánicas sencillas pero atrayentes para el jugador. Una delicia de principio a fin.

Para terminar, si hay un lanzamiento de 2025 al que le tengo unas ganas locas, ese es sin lugar a dudas Leyendas Pokémon: Z-A. Como enamorado de la saga, es para mi un motivo de celebración cualquier nuevo lanzamiento de esta franquicia. Pero en este caso, habiendo disfrutado tanto de su predecesor Leyendas Pokémon: Arceus, celebro que Game Freak haya decidido diversificar su línea principal de juegos hacia este camino más enfocado a la acción. Si al primer título pude echarle fácilmente más de 100 horas para conseguir todos los registros en la Pokédex de Hisui, no me quiero ni imaginar cuantas más podré dedicarle a esta nueva entrega.

Keyser Soze

–Favorito del año: Dragon’s Dogma 2
–Decepción del año: The Plucky Squire
–Sobrevalorado del año: Todos los soulslikes de 2024
–Infravalorado del año: Lorelei and the Laser Eyes.
–Juego que merece una mención: Mouthwashing
–Deseado de 2025: Intergalactic: The Heretic Prophet

Si hay un juego que este año me ha parecido por encima del resto es Dragon’s Dogma 2. Probablemente el título que personalmente más me ha metido dentro de la aventura que estaba viviendo a través de un gameplay y unas mecánicas donde toda la orquesta gira alrededor del instrumento de la exploración. Es un juego que tiene muchas pegas para quien busque cosas más arcade, es decir, con un combate más ágil y satisfactorio pero yo he encontrado esa dopamina y ese gustito en perderme en sus tierras, en hacer misiones secundarias y ver cada rincón. Zelda: Breath of the Wild y más adelante Elden Ring marcaron un camino que ha sido seguido por la gente de Capcom y han conseguido darme con Dragon’s Dogma 2 la experiencia más similar a la vez que novedosa de esos dos tótems tan gigantes.

Un título del que esperaba mucho más y que se puede resumir en que todo lo que podía ofrecer ya lo vimos en los tráilers. Además, sus mecánicas, una vez pierden ese efecto sorpresa, se hacen pesadas y tediosas y, honestamente, aunque habrá a quien le pueda gustar a mí no me ha encandilado.

Voy a usar el apartado del jiego sobrevalorado para nombrar a los-18-millones-de-souls-like-de-2024. Sí, la industria necesita algo más que gente imitando la exitosa fórmula de From Software. Los usuarios también lo necesitamos. Dejen hacer bien este tema a quien ya lo ha mastereado pero por favor, estudios, si nos leen dejen de intentar hacer el enésimo soulslike. Es cansino, tedioso y no aporta nada. Hagan juegos para hacer negocio, vale, pero también para hacer cultura. Hacer refritos no es eso. Definitivamente no lo es.

Y mira que ha estado nominado a los GOTY pero aún así considero que es un juego que no está recibiendo la atención que se merece. Un título que te hará explotarte la cabeza a pensar de una manera adictiva en la que siempre quieres avanzar un poquito más. Desde The Witness no veía un juego de puzles que produjese esa sensación. Enorme. Brutal. Maravilla. Genialidad. Total, que lo tenéis que jugar.

De lo último que he jugado este año ha sido este Mouthwashing. Un título de literalmente dos horas con algunos puzles y el resto anclado en el walking en primera persona. ¿Es posible que un juego con gráficos de PSX que básicamente es andar y andar en medio de una nave espacial a punto de estrellarse tenga algo que ofrecerte? Sí y mil veces sí. Su guión y sobre todo su estructura narrativa es una cosa de otro planeta, nunca mejor dicho, y que ojalá durase 10 o 12 horas más.

No lo parece pero si acabase llegando Intergalactic: The Heretic Prophet sería ese. Ahora mismo tengo todos mis ojos puestos en lo nuevo de Naughty Dog.

Juan Palma

PalmaSoft

–Favorito del año: The Legend of Zelda: Echoes of Wisdom
–Decepción del año: Endless Ocean: Luminous
–Sobrevalorado del año: Palworld
–Infravalorado del año: Emio el Sonriente: Famicom Detective Club
–Juego que merece una mención: Splatoon 3
–Deseado de 2025: Metroid Prime 4: Beyond

Debo admitir que este año no he jugado todo lo que hubiese querido, pero aún con todo no he tenido grandes problemas para decidir cuál es mi título favorito de 2024. Se trata de The Legend of Zelda: Echoes of Wisdom, y por varias razones. La más importante es porque siempre he valorado el rol activo de la princesa Zelda en sus diferentes juegos, especialmente en los más recientes Breath of the Wild y Tears of the Kingdom, y por eso esperaba con muchas ganas el día que por fin fuese la protagonista jugable de su propia aventura. La otra razón es que es también un título novedoso en términos jugables al alejarse del estilo habitual de los juegos de perspectiva cenital de la serie y traer el componente creativo que hemos visto en las recientes entregas 3D, algo que quizá no sea del gusto de todos, pero yo personalmente lo considero un acierto y muy apropiado para que la llegada de la nueva protagonista se sienta como un juego diferente y con estilo propio, en vez de un simple cambio cosmético.

Mi decepción del año bien podría ser Endless Ocean: Luminous, y no es fácil decir eso, porque es un juego que ya desde el primer momento se sabía que iba a ser un título pequeño y de escasas pretensiones. Lo cual no está mal, y es de hecho una las razones por las que apreciaba las entregas de Wii. Endless Ocean siempre fueron títulos que apostaron por la sencillez y por un desarrollo carente de acción y desafíos para poder ofrecer una experiencia relajante. No le pedía mucho más a Luminous, e incluso la idea de su multijugador para hasta 30 jugadores le aportaba atractivo adicional. Pero el juego resultó ser inferior a las dos primeras entregas por un desarrollo demasiado mundano y sin ambición, limitado a ser una lista de tareas en mapas generados proceduralmente que se vuelven repetitivos al poco tiempo. Me dio mucha pena, porque realmente me hizo ilusión el regreso de esta apreciada serie de los tiempos de Wii.

Palworld aterrizó a principios de este año y causó sensación rápidamente, llegando a vender quince millones de copias en un mes y alcanzar dos millones de jugadores conectados simultáneamente, además de generar una notable discusión a su alrededor. Pero yo soy de la opinión de que el juego de Pocketpair ha recibido mucha más atención de la que probablemente merece. No voy a entrar en la polémica sobre las acusaciones de plagio, asunto que se está dirimiendo en los tribunales, pero sí que me voy a meter en el poco inspirado estilo y desarrollo del juego, basado en tomar elementos de diferentes sitios y mezclarlos sin mucho criterio y sin llegar a conseguir un producto que transmita esencia propia. Puede ser divertido, no digo que no, e incluso se podría llegar a apreciar su peculiar sentido del humor, pero aún con todo eso, creo que ha tenido más bombo del que merece.

Quisiera dedicarle unas palabras a Emio el Sonriente: Famicom Detective Club, porque siento que es un juego que ha pasado bastante desapercibido, a pesar de que Nintendo logró generar una notable expectación durante su intrigante anuncio. No paso por alto que es un juego que definitivamente tiene un público reducido, pero incluso así tengo la sensación de que no ha sido excesivamente valorado, tal vez por ser de ese género tan injustamente denostado como es la novela visual. Emio es un magnífico ejemplo de como las novelas visuales también pueden hacer gala de altos valores de producción y de un desarrollo que implica a los jugadores mucho más allá de elegir entre diferentes respuestas durante los diálogos. Creo que es un título que merece la pena considerar.

Mi mención especial de este año va para un juego que no es de 2024, pero dejadme que me explique. Se trata de Splatoon 3, que durante 2024 cumplió su segundo año en el mercado y puso fin a su ciclo de desarrollo, con lo que ya no recibirá más actualizaciones que añadan novedades. La razón por la que creo que merece una mención especial es porque creo que en este contexto de pases de batalla, microtransacciones, y similares, Splatoon 3 ha sabido mantenerse firme en su promesa de añadir nuevo contenido de manera continua y gratuita durante dos años, y donde los DLC de pago solo han existido como material independiente de los modos multijugador. Además no puedo olvidarme del Grand Festival, la emotiva fiesta que Nintendo preparó para conmemorar el segundo aniversario del juego, y que vino con todos los detalles. Una explanada habilitada para celebrar el festival, tres escenarios, y una programación con prefiesta, fiesta y postfiesta que se prolongó durante tres días. Un espectáculo único y memorable que nos recuerda que los videojuegos a veces pueden ser mágicos, y al que le dediqué toda una crónica que podéis leer aquí.

Y hablando ya de 2025, elegir mi título más esperado ha sido muy fácil, porque en realidad llevo esperándolo más de siete años. Estoy hablando, por supuesto, de Metroid Prime 4: Beyond, anunciado durante el E3 2007 y desaparecido durante años, y que finalmente durante 2024 se dejó ver por primera vez y confirmó su lanzamiento en 2025. Soy consciente de que el próximo año será también el inicio de la nueva generación de Nintendo y que sin duda habrá muchos juegos emocionantes que ahora mismo no conocemos, pero incluso así, no creo que pueda haber nada que me ilusione más que la llegada de Metroid Prime 4: Beyond. Ha sido una espera muy larga, y tengo mucha confianza en que valdrá la pena.

Pasajero_Oscuro

– Favorito del año: Zelda Echoes of the Wisdom
– Decepción del año: –
– Sobrevalorado del año: –
– Infravalorado del año: Bō – Path of the Teal Lotus
– Juego que merece una mención: Fantasian Neo Dimension
– Deseado de 2025: Goner

Pablo Sánchez

Wuyashen

–Favorito del año: Warhammer 40 000: Space Marine 2
–Decepción del año: Dragon Age the veilguard
–Sobrevalorado del año: Astro bot
–Infravalorado del año: Marvel Rivals
–Juego que merece una mención: Palworld
–Deseado de 2025: Transformers Reactivate

Bueno.. ¿qué decir del 2024? Tantos juegos y poco tiempo para hablar de tantos, pero sin duda Warhammer 40k: Space Marine II tiene un lugar especial. No sólo por la excelente representación de su universo sino porque a nivel de juego Saber interactive sabe escuchar y poner soluciones a los fallos. Esto no es ninguna novedad, puesto que si quieres tener un juego online con una base de jugadores activa, tienes que ser consciente de que a veces la gente con más de 100 horas, e incluso 1000, igual sí que se han dado cuenta de ciertos detalles, como el hecho de que en la actualización 5.0 las armas de esgrima no funcionasen bien.

Pasando a otro orden de cosas el efecto Baldurs Gate 3 no es fácil de replicar y mucho menos con una saga con una ambientación tan oscura y seria como la que proponía Dragon Age. Sinceramente eso de no tener animaciones para recoger cofres… vale, es molesto cuando lo haces 500 veces, pero que ni siquiera se hayan molestado en poner algo tan básico con un juego tan esperado me parece un insulto a todos los fans que esperaban con ansía esta entrega.

¿Qué decir ahora de Astro Bot? para mi la mayor robada del año con varios juegos muy superiores sólo porque es un juego conmemorativo de los años de Play. No creo que eso justifique que el juego en sí es un plataformero que sí tiene mecánicas únicas por su mando, pero no es una tecnología nueva. Nintendo la implementó hace años con la DS y nadie decía que era revolucionario, pero como es de Sony supongo que los fans incondicionales tienen una venda en los ojos y no ven que están reutilizando una tecnología de otra empresa.

Tras varios fracasos con los Hero Shooter como Overwatch o Paladins la gente estaba ya quemada, pero llegó un nuevo contendiente: Marvel Rivals. ¡No es para menos!, puesto que muchos personajes pueden recordar a los de Overwatch, pero a día de hoy esto va a pasar con cualquier juego para ser honestos, pero bueno… La realidad es que Marvel Rivals se siente entretenido y no es frustrante como solía pasar con otros, incluso en el ámbito competitivo se siente muy bien y sí es verdad que hay personajes un poco más fuertes que otros, pero acaba de salir al mercado así que sólo es cuestión de tiempo que estas cosas se vayan solucionando.

Sin lugar a dudas, quitando las polémicas, Palworld ha sido un juego que he disfrutado muchísimo ya sea haciendo el tonto, combatiendo e incluso con la crianza. Para todos aquellos a los que nos gusta Pokémon el juego está muy bien y realmente es una gran alternativa y más con su nueva expansión que incluye una nueva isla y muchos Pals nuevos.

Por último, como gran fan de Transformers y de sus juegos no podría tener más ilusión por una nueva entrega. De momento no se sabe nada de Transformers Reactivate más allá de leaks sospechosos, pero las noticias deberían estar al caer.

Daniel Martín

Young Link

–Favorito del año: Final Fantasy VII Rebirth
–Decepción del año: EA Sports FC 25.
–Sobrevalorado del año: Elden Ring: Shadow of the Erdtree.
–Infravalorado del año: Pokémon TCG Pocket.
–Juego que merece una mención: Helldivers 2.
–Deseado de 2025: Clair Obscur: Expedition 33.

Impresionante en todos los sentidos. La cantidad de contenido para hacer es una brutalidad, con una variedad nunca vista en un videojuego. El Gold Saucer ya daría para un juego a parte, pero es que el minijuego de cartas es un vicio absoluto. Más de 100 horas echadas en una época en la que intento solo ponerme con juegos cortos. Cada vez que pensaba que ya lo había visto todo en el juego, me sorprendía con algo nuevo. Square Enix ha logrado llevar la franquicia a otro nivel. Gracias por darnos esta obra maestra.

Por primera vez en años he tenido que prescindir de comprar el FIFA que caía anualmente. Es más de lo mismo, sin apenas innovación y con más fallos que nunca. EA se está pasando con el abuso a los jugadores y espero que de una vez cambie, aunque lo dudo porque por desgracia sigue teniendo ventas millonarias. Se mantienen arriba porque no tienen competencia, y hagan lo que hagan veo difícil que caigan. Ojalá algún día Konami vuelva a ponerse las pilas. Aunque entiendo que hay gente que sigue disfrutando de lo mismo cada año, yo ya no soy parte de esa base de jugadores.

No me gusta en general todo lo que rodea Elden Ring. Me encantan los Souls, los he jugado todos y tengo casi todos sus platinos, pero esta entrega se me hizo demasiado larga y enorme, y no llegué a conectar con ella en ningún momento. Es por eso que me parece que está demasiado sobrevalorado, y su expansión es más de lo mismo. ¡Incluso estuvo nominado a juego del año! No dejo de sorprenderme. Es obvio que es solo una cuestión de gustos, pero para mí no alcanzó las expectativas que se habían creado a su alrededor.

Por ser de móvil no se le da el crédito que merece, pero la realidad es que es un videojuego divertidísimo con unas mecánicas adictivas que me tiene súper enganchado. Me tiro el día entrando a ver si puedo abrir ya un sobre, gastando los relojes de arena, combatiendo online, etc. Tengo muchas ganas de que desbloqueen los intercambios para conseguir todas las cartas de la baraja. Si te gustan los juegos de cartas, este es un imprescindible.

La cantidad de horas que le metí es increíble. Un juego cooperativo frenético, bien diseñado y tremendamente divertido, ideal para jugar con amigos. Es el tipo de juego que te engancha y no te suelta, con una jugabilidad que, aunque simple, se convierte en una experiencia de equipo espectacular. Si eres fan de la acción cooperativa, no te lo puedes perder. Una lástima que no añadan más trofeos con las nuevas expansiones, porque haría que el pique siguiera infinitamente.

Desde el primer trailer me dejó enamorado con su estilo artístico, y ya tras ver gameplay me tiene con un hype enorme. Tengo ganas de rol por turnos, así que no puedo esperar más para tenerlo entre mis manos. Tiene un aspecto visual único que no se ve en muchos otros títulos, y la propuesta de gameplay promete ser muy envolvente. Es de esos juegos que, aunque no se sabe mucho aún, ya te tienen enganchado desde el primer vistazo.

Zurisadai

–Favorito del año: Kingdom Hearts (relanzamiento en Steam)
–Decepción del año: Silent Hil the Short Message
–Sobrevalorado del año: Dragon Age: The Veilguard
–Infravalorado del año: Shadows of the Damned: Hella Remastered Edition.
–Juego que merece una mención: Silent Hill 2 Remake.
–Deseado de 2025: Death Stranding 2 (si el tito Gabe no enseña Half-life 3 claro).

Bueno, no se puede negar que ha habido nivelazo este año. Propuestas muy variadas en todo tipo de géneros, proveniente de cualquier punto del mundo y con todo tipo de público objetivo en mente. Silent Hill, una de mis sagas fetiches a las que he dedicado adoración absoluta desde mi adolescencia, ha resucitado (y en buena forma), Like a Dragon parece haber tenido una de las entregas más potentes en años (bueno no, que RGG lanza megahits cuasi mensuales como churros y el Gaiden del año pasado es muy digno) y en general ha habido mucho juego de monas chinas, todos contentos menos los de siempre. Los que estamos aquí en realidad somos conscientes de que el medio no hace más que moverse, sigue buscando sorprendernos tanto o más como hace una o dos décadas y aunque a algunos les choca demasiado como para no poder soportarlo. En lo que respecta a mi persona quiero que el videojuego de 2025 me me sorprenda igual que el de este año, que me descoloque e ilusione como ningún otro medio… y afortunadamente 2025 apunta a maneras.

Bueno ya he escrito un texto muy bonito de introducción centrándome en el futuro y todo eso, pero resulta irónico que mi favorito de este año tenga más años que Carracuca, y que además tenga la cara de cemento armando como para incluir esa saga que ha jugado todo Cristo menos yo ¿Verdad? Curiosamente, poco antes de comprarme la saga me había repasado la segunda (y mejor) entrega de la saga, Kingdom Hearts 2, y me fascinó a tal nivel que no me importó repasarlo a los pocos meses junto al resto de la saga. Me alegra y duele a muchísimos niveles haber «re-conectado» ahora. Me alegra porque su calidad es apabullante, toda la saga rezuma amor desde el minuto uno y, aún con sus tonterías y japonesadas varias, sabe capturar corazones tal y como lo hizo en el momento de su estreno, conmigo ha funcionado. Duele porque KH2 es un juego que considero muy importante para mí, me dio alegría siendo un crío -hijo único- atravesando un proceso de divorcio parental, y que en sus tardes de soledad ver todo lo que salía por la pantalla al introducir el disco era mucho más que magia. Sin duda, mi viejo pero personalmente valioso «descubrimiento» del año.

La decepción que he puesto este año ha sido colocar algo, no voy a mentir, en este caso una de las peores cosas que he catado este año. No hay mucho más que pueda decir de un juego que sacaron gratis en PS5 porque si cobraban 5 euros las oficinas de Sony se hundían a lo más profundo del noveno círculo del infierno. Para nada es lo peor que ha hecho alguna vez Konami con la IP pero es la típica cosa que para nada me gusta ver en una saga que adoro. Un regreso a pies juntillas con temas metidos con calzador tan alto como el Empire State y en general un resultado mediocre que servirá para pasar el rato -no ha llegado a matar a nadie como hizo SH:Ascencion (ja, ja)- pero que en última instancia acaba siendo rotundamente mediocre y no ayudó en nada a generar confianza en los siguientes a los que Konami les había dado el visto bueno para continuar con su mítica saga.

Dragon Age: The Veilguard es desolador. Es verdad que Inquisition ya estaba asomando la patita con cosas que nos hacían más gracia en el pasado que ahora (¿alguien dijo misiones con tiempo de espera?) pero lo pasábamos por alto porque la telenovela caballeresca tenía un pase. Lo que he visto por parte de la crítica -sobre todo especializada- este año respecto a Dragon Age: The Veilguard es nada más y nada menos que un montón de aplausos vacíos. Quizá a tenor de llevar la contraria con toda la polémica idiotizada que se puede sacar con temas ajenos al propio juego o quizá por puro conformismo, pero yo sinceramente no aplaudiría el camino que está tomando la saga, eso está clarinete. Estoy a punto de ser la persona millón en decir «nada que ver con Dragon Age: Origins» y no seré la última, tenedlo claro.

Literalmente soy un Testigo de Jehová con Shadows of the Damned, me produce tremenda tristeza. Soy consciente de que es un juego añejo que tiene sus «cosas degradantes» y que no es ni una cuarta parte de lo que pudo haber sido una joya en potencia llamada «Kurayami» y parece que una vez más ha vuelto a tener un descalabro en ventas que no lo salva ni Superman en su día menos ocupado. Tiene carisma, mala leche, es cortito y Akira Yamaoka firma un trabajo sonoro que es una delicia. No puedo decir más, me hubiese gustado poder ver más de García Hotspur y su huesudo compañero pero parece que me quedaré con las ganas.

Silent Hill 2 remake se ha acercado muchísimo a lo que llevo cerca de una década deseando jugar. Una versión actualizada, inmersiva y más divertida si cabe de uno de los videojuegos más intrigantes jamás programados. Bueno si, es un magnífico juego y me alegro de que haya salido bueno, además, nunca les cerré la puerta a los de Blobber a pesar de que miraba con recelo (me medio enorgullezco de ello) cada trailer que se mostraba como ya dejé claro en mi avance para esta web pero entonces me doy de bruces contra mi propia realidad. Soy un purista del juego original, considero que aquél juego tan «tosco» y algunos dirán que feote, tenía «todos los aciertos del mundo» y en esta reimaginación ha fallado alguno que otro.Oye, que aprecio muchísimo la pasión que ha mostrado el nuevo estudio y se ha quedado cerquísima de ser lo más top del año, para mi claro, pero no puedo cederle el puesto por encima de Sora. Aún así, ¡Gran aplauso para el remake de SH2!

Hay muchísima cosa que deseo para el próximo año, a pequeña y gran escala. Vuelve el legendario Big Boss y tendremos movida por Vice City, eso está claro y es motivo de sobra para interesarse por el año que se viene. Sin embargo, me intriga muchísimo más lo nuevo de Kojima, no porque considere al creativo japonés el Georges Méliès de los videojuegos (¿HAY ALGUNA DUDA DE QUE LO SEA?) sino porque sabe dotar de un encanto mágico cualquier cosa en la que ande metido que ya lo considero hasta de otra época. Desde cosas que aún enseña de tapadillo como el futuro OD o algo que ya ha enseñado más «a fondo» como Death Stranding, me despiera una ilusión que considero extraña y sin duda nada usual, no es para menos porque siempre hay una pizca de algo irrepetible en cada cosa que pare. Con Death Stranding me ha sido extremadamente fácil obviar los defectos y coñazos que presenta el juego y me ha hecho maravillarme con algo tan básico como caminar ¡Y HASTA ME HA OBSESIONADO EL MODO FOTO! (algo que definitivamente no me pasa nunca). Ojalá nos dure muchos años más el Koji-man.